Alejandro Peza
Volqueteros del sur de Quintana Roo han tenido que migrar a los estados de Campeche y Yucatán ante la falta de empleo; obra pública y privada lleva más de un año detenida
El secretario general del sindicato Caja Roja, Antonio González indicó que la crisis en el sector de la construcción continúa afectando severamente a los volqueteros del sur de Quintana Roo, quienes se han visto obligados a migrar temporalmente a los estados vecinos de Campeche y Yucatán ante la falta de trabajo en la región.
El líder confirmó que desde hace más de un año la obra pública y privada prácticamente se ha detenido, dejando sin ingresos a cientos de operadores y propietarios de unidades.
Antonio González explicó que la inactividad comenzó de forma gradual a mediados de 2024, pero se agudizó durante 2025, cuando varias obras proyectadas por los gobiernos municipal y estatal quedaron en pausa o no se concretaron. En el ámbito privado, añadió, la inversión también cayó drásticamente debido a la desaceleración económica y a la falta de nuevos desarrollos en Chetumal y comunidades cercanas.
Ante este panorama, un número creciente de volqueteros ha optado por trasladar sus unidades a Campeche y Yucatán, donde la actividad constructiva se mantiene más dinámica, impulsada por proyectos carreteros, industriales y de infraestructura urbana. Según el líder sindical, al menos el 40 por ciento de los trabajadores afiliados ha tenido que migrar para asegurar ingresos, dejando a sus familias atrás por periodos prolongados.
“La situación en el sur está muy complicada; no hay obra pública, no hay privada. Llevamos más de un año sin trabajo constante. Muchos compañeros han tenido que salir a Campeche y Yucatán para poder mantener a sus familias, porque aquí simplemente no hay nada”, lamentó González.
El representante del sindicato Caja Roja señaló que operar fuera del estado implica costos adicionales de traslado, hospedaje, combustible y mantenimiento, por lo que las ganancias son menores. Sin embargo, es la única alternativa viable ante la falta de contratos en la zona.
González hizo un llamado a las autoridades estatales y municipales para reactivar los proyectos de infraestructura pendientes y generar condiciones que permitan a los volqueteros regresar a Quintana Roo. Advirtió que, de continuar la parálisis del sector, más trabajadores se verán forzados a migrar, y existe el riesgo de que muchos no vuelvan si encuentran estabilidad laboral en otros estados.
Mientras tanto, las decenas de unidades que permanecen en Chetumal continúan estacionadas, evidenciando una crisis que afecta no solo al gremio volquetero, sino también a toda la cadena de la industria de la construcción en el sur de Quintana Roo.