
Alejandro Peza
El conflicto laboral en el Nacional Monte de Piedad, que estalló en huelga a nivel nacional en el primer minuto de este miércoles, también se reciente en la ciudad de Chetumal, donde los trabajadores mantienen cerradas las instalaciones como parte de la exigencia por el respeto a su Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
En esta ciudad, el movimiento está encabezado por Mario López Marrufo, dirigente sindical en la región sur del estado, quien se ha convertido en una de las voces más firmes en defensa de los derechos de los empleados.
Desde la noche del pasado martes, las puertas de las dos sucursales de Chetumal permanecen bloqueadas con las tradicionales banderas rojinegras, símbolo de la huelga legalmente reconocida. Los trabajadores aseguran que no buscan perjudicar a la ciudadanía, pero advierten que la medida es necesaria debido a lo que califican como violaciones reiteradas al CCT y un “trato insensible” por parte de la administración central.
Mario López Marrufo, representante del Sindicato Nacional de Monte de Piedad en el sur de Quintana Roo, aseguró que la huelga es el último recurso tras meses de intentos de negociación infructuosos.
“No estamos pidiendo nada fuera de la ley. Lo único que exigimos es que se respeten nuestras prestaciones y condiciones laborales pactadas en el contrato colectivo. La institución se ha beneficiado de nuestro trabajo durante décadas y hoy pretende recortar conquistas históricas. No lo vamos a permitir”, afirmó.
El dirigente subrayó que la base laboral en Chetumal se mantiene unida y firme, pese a la presión que representa la paralización de servicios en una ciudad donde muchas familias recurren al Monte de Piedad para empeñar alhajas, herramientas o electrodomésticos en busca de liquidez inmediata.
El cierre de la sucursal ha generado inquietud entre usuarios que acudieron en busca de préstamos prendarios y no pudieron concretarlos. Algunos ciudadanos expresaron su respaldo a los trabajadores, mientras otros manifestaron preocupación por no poder recuperar sus prendas empeñadas en los plazos previstos.
El sindicato aclaró que, durante el tiempo que dure la huelga, los plazos y compromisos contractuales con los clientes se suspenderán, de modo que ningún usuario perderá sus pertenencias. Sin embargo, reconocieron que la suspensión temporal de servicios sí afecta la economía local.
Diversas organizaciones sindicales y civiles de la capital han expresado respaldo al movimiento, señalando que se trata de una lucha legítima en defensa de los derechos laborales.
El estallamiento de la huelga en el Nacional Monte de Piedad ocurre tras semanas de tensiones en todo el país, luego de que la dirigencia sindical denunciara intentos de la institución por modificar unilateralmente cláusulas del CCT. En ciudades como Cancún, Mérida y Villahermosa también se reportan sucursales cerradas.
En Chetumal, Mario López Marrufo señaló que los trabajadores están dispuestos a mantener la huelga el tiempo que sea necesario hasta lograr un acuerdo justo:
“Estamos convencidos de que la razón nos asiste. La huelga no es contra la gente, sino contra una administración que pretende debilitar al sindicato. Aquí en Chetumal no vamos a dar un paso atrás”, sentenció.
Mientras tanto, las banderas rojinegras ondean sobre la fachada del Nacional Monte de Piedad en el corazón de la ciudad, convirtiéndose en un símbolo visible de un conflicto laboral que, por ahora, mantiene en vilo tanto a trabajadores como a usuarios.