Alejandro Peza
El Instituto de Movilidad de Quintana Roo (Imoveqroo) mantiene y ha reforzado operativos de supervisión dirigidos a taxistas de los municipios de Othón P. Blanco, y Bacalar, con el objetivo de verificar el cumplimiento de la normatividad vigente, la correcta documentación de las unidades y la protección de los pasajeros mediante seguros de viajero actualizados.
Estos operativos se realizan de manera aleatoria en distintos puntos estratégicos de Chetumal y Bacalar, incluyendo avenidas principales, zonas de alta afluencia y accesos a comunidades, donde personal del Imoveqroo revisa que los conductores cuenten con licencia de conducir vigente, tarjetón de operador, concesión o permiso correspondiente, así como la tarjeta de circulación y placas en regla.
Uno de los principales ejes de estas acciones es la verificación de que las unidades de transporte público cuenten con un seguro de viajero vigente, requisito indispensable para garantizar la protección de los usuarios en caso de un accidente. Las autoridades señalaron que este seguro es una obligación legal y una medida fundamental para brindar certeza y tranquilidad a quienes utilizan el servicio de taxi.
Además de la revisión documental, los inspectores también realizan una inspección visual de las condiciones físicas de las unidades, a fin de constatar que se encuentren en buen estado mecánico y que no representen un riesgo para los pasajeros. En caso de detectarse irregularidades, se levantan actas administrativas y se aplican las sanciones correspondientes conforme a la ley, que pueden ir desde multas hasta el retiro temporal de la unidad de circulación.
Algunos conductores reconocieron la importancia de estas revisiones para brindar un servicio más seguro y ordenado, aunque también solicitaron que las inspecciones se realicen con apego a la ley y respeto a los derechos de los trabajadores del volante.
El Instituto de Movilidad de Quintana Roo informó que este tipo de operativos continuará de manera permanente en distintos municipios del estado, como parte de una estrategia integral para garantizar un transporte público seguro, regulado y confiable tanto para la población local como para los visitantes que se desplazan por la región.